Las docentes investigadoras María Andrea Nicoletti y Marisa Malvestitti compilaron el libro Salesianos lingüistas en la Patagonia y Tierra del Fuego que busca dar a conocer cómo se realizó el registro y la comunicación sobre las lenguas de los pueblos originarios desde espacios misionales.
Participaron de la publicación: María Emilia Orden, Verónica Domínguez, Ana Fernández Garay, Ana María Fernández y Rodrigo González Vivar.
Considerando al idioma como una creación original de un pueblo, y en el marco del Decenio internacional de las lenguas indígenas y de la preparación del 150 aniversario de la llegada de los salesianos a la Argentina, la reflexión sobre el trabajo lingüístico favorece la recuperación de la memoria y contribuye a la construcción de una historia original y alternativa de los pueblos originarios de la Patagonia. Mediante la explicación de las circunstancias de producción de textos, vocabularios y oracionales como testimonios de la vida cotidiana, el libro intenta aportar una perspectiva integral la temática.
¿Cuál fue la motivación para realizar este trabajo?
Desde distintos proyectos de investigación, e incluso antes de la creación de la UNRN, trabajamos juntas en los materiales que la iglesia católica confeccionaba para la evangelización de los pueblos originarios. Esta cuestión abrió una línea particular, poco explorada y pionera en nuestra región, la lingüística misionera. A partir de materiales de órdenes y congregaciones religiosas que desarrollaron su trabajo en la Patagonia argentina y chilena como jesuitas, franciscanos, capuchinos, lazaristas y salesianos, pudimos acercarnos a las metodologías de evangelización mediante la palabra, y también al aprendizaje que misioneros y misioneras tuvieron que hacer sobre las lenguas originarias para comunicarse. Esto último los llevó a confeccionar distintos materiales, entre ellos vocabularios de diferentes lenguas bilingües o trilingües, dependiendo de los orígenes de las y los religiosos.
¿Qué aspectos significativos o destacables descubrieron en la tarea de recopilación de los salesianos?
La confección de los vocabularios, glosarios y gramática tuvo como finalidad el servicio a la adecuación a la evangelización y la trasmisión de la fe. Mediante la retención de palabras claves y de construcciones gramaticales, se trató de favorecer la enunciación, apoyar la pronunciación y la fonética, mejorar la comunicación y servir a la traducción de los contenidos de la fe, la moral y las costumbres. Por ello, en una primera etapa de las misiones, la construcción de los vocabularios obedecía menos a intencionalidades científicas, lingüísticas y académicas cuanto a facilitar aspectos comunicativos.
Esta información es muy valiosa porque ayuda a conocer aspectos de la vida cotidiana de los pueblos indígenas en sus territorios y en los ámbitos de misión, las particularidades y recursos del espacio geográfico. También posibilita observar cómo se realizó la traducción y adaptación de conceptos abstractos y complejos en el campo y reconocer cómo fue divulgándose el español en los territorios desde fines del siglo XIX.
El objetivo prioritario no era la recuperación o “salvataje” de la cultura y la lengua de los pueblos originarios, ya que éstas estaban plenamente vigentes. Sin embargo, pocos años después, los recopiladores comenzaron a notar que los datos eran apreciados en los ámbitos científicos, ya que poco se conocía sobre estos idiomas. Fue así que redactaron gramáticas y diccionarios que se publicaron tanto en Argentina como en Italia entre 1901 y 1928. Por otro lado, además de registros escritos y la traducción de oraciones católicas, más avanzado el siglo XX también realizaron algunas grabaciones en audio.
De este modo, con distinta profundidad, dieron cuenta de aspectos del habla en las lenguas
mapuzungun, günün a yajüch, aonekko ‘a’ien (tehuelche), selk’nam, haush y de una variedad kawésqar del Estrecho de Magallanes. Cuando descubrimos el primer vocabulario hecho por una mujer, la Hermana Rosa Gutiérrez, hija de María Auxiliadora, se abrió la puerta a una interesante red de mujeres, que nos ayudaron a poner en valor el trabajo misionero de las Hermanas, por lo que este trabajo fue también un trabajo de género que puso en valor una labor mayoritariamente masculina.
¿Qué aportes puede ofrecer esta publicación para la construcción de una "historia original y alternativa" de los pueblos originarios?
En las relaciones establecidas entre miembros de los pueblos originarios y misioneros se implicaron cuestiones de asimetría y poder, que son controversiales y están siendo revisadas en el presente. Muchos de estos relevamientos se realizaron en un contexto de apropiación territorial y genocidio. En lo particular a la obra, entendemos que en primer lugar el libro aporta a destacar la participación agentiva de los hablantes de las distintas lenguas en esta tarea de recopilación desarrollada con continuidad. Es fundamental enfatizar las estrategias de coproducción de los registros, que se dieron a conocer bajo el nombre de autor de las y los religiosos. Se evidencia diversidad de género, edades y procedencias de los hablantes que participaron en las documentaciones de las lenguas; en algunos casos el cruce de fuentes hizo posible identificar con claridad nombres propios, datos biográficos o fotografías, en otros se intuyen en las frases y expresiones que aportan los textos. Finalmente, la revisión historiográfica posibilita poner en debate heterogeneidades en las relaciones establecidas entre salesianos y pueblos originarios en distintos contextos fuegopatagónicos.
María Andrea Nicoletti es Doctora en Historia de América (Universidad Complutense de Madrid) y Profesora en Historia (UCA). Es directora y co-directora de proyectos de investigación relacionados con las prácticas religiosas y educativas en Patagonia, estudios binacionales chileno-argentinos y los procesos de desarrollo culturales, sociales y religiosos. Realiza estudios sobre historia de la Patagonia, evangelización, prácticas religiosas y modelos educativos de la Iglesia católica en la Patagonia.
Marisa Malvestitti es Doctora en Lingüística (UBA). Es profesora asociada regular del área Ciencias del Lenguaje en la UNRN Sede Andina e investigadora en el Instituto de Investigaciones en Diversidad Cultural y Procesos de Cambio. Integra el comité académico de la Mención en Ciencias Sociales y Humanidades del Doctorado de la UNRN. Dirige actualmente el proyecto Interacciones entre lenguas y territorios en el pasado y en el presente. Ecología lingüística en Fuegopatagonia. Su producción científica comprende estudios sobre sociolingüística, descripción gramatical e historia de la documentación de las lenguas originarias y el español de contacto en la Patagonia.